Cultura y desarrollo, 6: Dinámica de la artesanía latinoamericana como factor de desarrollo económico, social y cultural
Podría parecer extemporáneo o un tanto paradójico dedicar esfuerzos a estudiar la artesanía, ese artículo que se elabora manualmente y que expresa formas tradicionales de producción, en plena era digital, cuando asistimos a una revolución de la tecnología de la comunicación y nos impactan a diario las novedades que salen al mercado; objetos manuables, que son a la vez teléfonos, cámaras fotográficas, computadoras, reproductores de música, video, y que nos involucran forzosamente en una visión nueva del mundo en el que trascurre la vida cotidiana, modifican el empleo del tiempo, las relaciones interpersonales y el imaginario social, en sentido general.
Sin embargo, el análisis de la artesanía como un fenómeno específico y de sus nexos y relaciones con diversos aspectos de la vida social, económica y cultural sigue siendo un tema vigente, tanto en contexto internacional como en el propiamente latinoamericano; lejos de perder interés, su valoración social se acrecienta y adquiere cada vez mayor reconocimiento en la medida en que la misma se asocia con nuevas nociones y conceptos como el de la importancia de la preservación de la diversidad cultural, el papel activo de los conocimientos tradicionales en la dinámica de cambio social y el lugar central de la cultura y la creatividad como factor de desarrollo humano.
Esta visión renovada del significado actual de la artesanía que se abre paso en las actuales circunstancias de la globalización, está indisolublemente ligada a la revisión del significado que se le atribuyen a los conceptos de Cultura y Desarrollo como resultado de la crítica al sistema desarrollista que ha llevado a la humanidad a una situación real de riesgo, generando una crisis que ha sido catalogada de inédita, tanto por su alcance como por sus características, y que ha impactado todas las esferas de la vida, desde las asociadas con el medioambiente y las condiciones del hábitat, hasta las financieras, comerciales, productivas, alimentarias, de los mercados laborales, etc.